El empleo de la madera en la edificación ha adquirido mayor relevancia en países desarrollados de Europa, Norteamérica y Oceanía, en los últimos 20 años, particularmente en edificios de mediana altura utilizando el sistema constructivo en madera contralaminada (CLT). Este aumento se debe a las importantes ventajas que presenta este sistema, entre ellas la rapidez de ejecución, la limpieza en el sitio de la obra y la reducción en la huella de carbono que está implícita en la madera. Entonces, en atención a que Chile es un país maderero y que tiene un alto déficit habitacional, es conveniente realizar estudios tendientes a generar antecedentes necesarios para conformar una base fundamentada sobre la cual se genere la normativa técnica y así facilitar el uso de este material en la construcción. Debido a que la madera es un material heterogéneo, que se puede modelar como un material ortotrópico, y que sus propiedades dependen de las condiciones de sitio de los bosques, la determinación de las propiedades del material y de los elementos constructivos elaborados con madera se deben determinar mediante ensayos experimentales.